Buenos Aires siempre tiene algo nuevo para descubrir y las propuestas para niños en el mes de julio son infinitas. La última vez fuimos en auto desde Montevideo por cuatro noches y resultó un gran plan. Salimos de Montevideo, cruzamos el puente Fray Bentos-Gualeguaychú y de ahí seguimos hasta Temaikén. Ese trayecto nos llevó alrededor de seis horas. Si van un fin de semana de vacaciones calculen que la aduana les puede llevar un poco más de tiempo.

De Gualeguaychú nos fuimos directo al Parque Temaikén donde almorzamos y pasamos la tarde. Fue una buena opción para acortar el camino y los pequeños quedaron fascinados con el parque. De Temaikén al centro de Buenos Aires se llega en menos de una hora.

En la capital porteña hay muchas opciones de alojamiento. Busquen un lindo apartamento en Palermo, es una zona preciosa y tranquila para ir con niños. Nos quedamos a dos cuadras del zoológico (que está cerrado) y desde ahí hicimos los paseos en auto, caminando o en subte. No se pierdan esa experiencia, a los niños les va a encantar viajar en subte!.

En Palermo hay muchas atracciones para visitar como el Planetario que tiene actividades para los pequeños, el Jardín Japones uno de los lugares más tranquilos de la ciudad o los Bosques de Palermo, donde se puede pasear por el lago o visitar el Rosedal. Los domingos por la mañana alquilan bicis para recorrer el circuito que se vuelve peatonal. Es un buen plan para toda la familia.

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Aprovechen para ver un lindo espectáculo u obra de teatro. El Cultural San Martín ofrece una cartelera especial para niños con dos espectáculos musicales para toda la familia: Ana y Wiwi y Clownies Re Fritos 2.0. Si los niños son chicos una linda opción puede ser el espectáculo del grupo santafesino de música para chic@s Canticuénticos, pensado para que los más pequeños de la familia disfruten se su primera experiencia teatral.

Un plan que siempre repetimos cuando vamos a Buenos Aires es la librería El Ateneo en la calle Santa Fe. Vale la pena visitarla por la belleza de su arquitectura y por su gran tamaño, cuenta con más de 120.000 ejemplares de libros. Hay sectores de libros para niños que seguro cautivarán la atención de los pequeños. Llévense un libro de recuerdo!.

A mis hijos les gustó mucho el Museo de los niños que se encuentra en el último piso del shopping del Abasto. Allí podrán jugar a ser médicos, periodistas, cajeros de supermercado, albañiles, jugadores de fútbol y muchos otros oficios. Hay una cancha de fútbol con gradas y barras bravas que alientan de fondo, no fue fácil sacarlos de ese rincón. Es recomendable ir entre semana para que puedan jugar más tranquilos y con menos gente.

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Las propuestas son interminables en la vecina orilla, les dejo la última antes de terminar. La ventaja de ir en auto es que fácilmente podrán visitar barrios alejados y en Caballito, los fines de semana se puede hacer un paseo gratis por el barrio en un tranvía eléctrico. El trayecto dura alrededor de 20 minutos y es una divertida experiencia, no se lo pierdan!.

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