Recién volvimos de México y voy a empezar este post con lo que más me han preguntado en los últimos días: ¿Ciudad de México con niños?, ¿Es seguro?, ¿Qué hicieron?, ¿Vale la pena?. Sí, vale la pena y creo que si queremos conocer y entender un país como México es necesario pasar por su capital, aunque no voy a negar que es una ciudad superpoblada, caótica, inmensa y por momentos es un plan un poco cansador para los pequeños de la familia.
Estuvimos cuatro días en Ciudad de México y lo último que quiero es desalentar a nadie con la idea de visitar grandes ciudades con niños. Pienso que no hay mejor regalo para los hijos que mostrarles el mundo. Más allá de que viajar al DF tiene su cuota de estrés, creo que es una oportunidad para descubrir la gran riqueza en historia indígena y colonial de este maravilloso país en el que sobran actividades para compartir con los niños.
Aquí va nuestro recorrido de cuatro días por la capital más antigua del Nuevo Mundo, anímense a descubrirla!.
Un buen lugar Nos alojamos cerca del barrio Rosa, en el Paseo de la Reforma -una de las avenidas más importantes y emblemáticas de la Ciudad de México- frente al monumento a la Independencia, conocido popularmente como el Ángel. Es una zona céntrica, segura y tranquila para transitar con niños, a pocos minutos se encuentra el bosque de Chapultepec donde hay espacios verdes para disfrutar.
Conozcan el Centro histórico
El casco antiguo de Ciudad de México es el más grande de América Latina y aunque la concentración de gente es grande en esta zona, no se puede dejar de visitar. Tomen a los niños de la mano y salgan a conocerlo. Alrededor del emblemático Zócalo encontrarán una mezcla increíble de edificios coloniales, construcciones aztecas, iglesias, palacios, representaciones de danzas prehispánicas y escenarios con grupos actuales de rock conviviendo juntos. Los imperdibles son: la Catedral Metropolitana, el Templo Mayor, en el que podrán ver los restos de un templo construido por los Aztecas y el Palacio Nacional donde se encuentran los famosos murales de Diego Rivera que representan la historia de México.
Escuchen una misa en la Catedral
La Catedral de Ciudad de México es el mayor templo de Latinoamérica, impresionante por su mezcla de estilos arquitectónicos y decorativos. Tuvimos la suerte de visitarla cuando estaba por comenzar una de las misas del domingo. Fue impactante ver la devoción de los mexicanos, escuchar el órgano, sentir el aroma del incienso y contemplar la docena de sacerdotes y monaguillos en el altar.
Deslúmbrense con las pirámides de Teotihuacan
Este es uno de los «platos fuertes» de Ciudad de México, un lugar imprescindible para los que deseen conocer uno de los yacimientos precolombinos más impactantes del mundo. El “lugar donde los hombres se convierten en dioses” queda a una hora del centro de la ciudad. Lleven calzado cómodo, algo para comer y agua porque la visita es larga y lo lindo es recorrerlo con tranquilidad. Subir a las Pirámides del Sol y de la Luna, contemplar las preciosas vistas panorámicas que ofrecen sus cúspides, caminar por la Calzada de los muertos y visitar el recinto palacial de Quetzalpapálotl. Si van con niños pequeños conviene llevar un carrito para los traslados de una pirámide a otra y de esa manera no agotar las energías en los largos trayectos.
Visiten la Basílica de Guadalupe
México es uno de los países con más católicos del mundo y Guadalupe es la basílica más visitada de América. Antes de ir lean la historia de la aparición de Guadalupe al indio Juan Diego. Allí podrán ver todos los detalles, el manto, el lugar donde apareció la Virgen y la antigua iglesia que se construyó a su pedido. Sea cual sea la inclinación religiosa de cada uno, es interesante observar la veneración que tienen los mexicanos por Guadalupe. Sólo para escuchar las preguntas de los niños y las conversaciones sobre la aparición de la virgen valió la pena la visita.
Deléitense con la comida
Uno de los encantos de México es su original gastronomía y aunque en un primer momento parezca una complicación para los niños, a los pocos días le encontrarán la vuelta. Mis hijos comieron muchas quesadillas, tacos de carne o pollo sin picante y pizzas. Mientras tanto, los adultos nos deleitamos con las exquisiteces de la tradicional comida mexicana.
Recorran el Bosque de Chapultepec y naveguen por el lago
Es un bosque enorme en medio de la ciudad que funciona como parque público desde el siglo XVI. Es uno de los sitios más bonitos para recorrer con los niños. Allí encontrarán el Castillo de Chapultepec, vale la pena subir hasta la terraza para contemplar el parque y el paseo de la reforma desde la altura. Además hay un jardín botánico, un zoológico, varios museos, espectáculos al aire libre, juegos para niños y hasta un lago con botes. Anímense a navegar en uno de ellos, fue un plan divertdísimo para los pequeños!.
No se pierdan el Museo Antropológico
Sin duda es uno de los grandes planes de la capital mexicana, inaugurado en 1964, este museo es famoso en el mundo porque alberga increíbles hallazgos precolombinos y en él se puede hacer un repaso de los miles de años de cultura centroamericana. La idea de visitar un museo de esta magnitud puede resultar tediosa con los niños, pero realmente vale la pena hacerlo. Hay muchísimo para ver, las salas se dividen por culturas: Olmecas, Mayas, Aztecas, Teotihuacanas. Es imposible ver todo con los pequeños, lo mejor es organizar la visita y elegir lo imprescindible, de esa manera lo podrán disfrutar sin aburrirse.
Disfruten del Zoológico y conozcan a los pandas
A los niños les encantó el zoológico de Chapultepec, no se querían ir!. Se encuentra en medio del famoso bosque y recrea los hábitats naturales de los animales con su vegetación. Los animales están agrupados según los climas en los que viven. Se pueden ver especies mexicanas y otros animales como jirafas, leones, orangutanes o canguros. Pero sin duda, los habitantes estrella son los osos pandas que fueron obsequiados por el gobierno Chino en 1975. El zoo salió en las noticias de todo el mundo cuando, en 1981, nació el primer panda en cautiverio.
Caminen por Coyoacán y tomen un helado.
Es precioso caminar por el pintoresco barrio de Coyoacán. Allí vivieron Cortés junto a la india Malinche, Diego Rivera y Frida Kahlo. Sus calles llenas de cafés, restaurantes y tiendas de artesanías conservan algo del encanto colonial, es uno de los barrios más antiguos de la ciudad. Transitar los fines de semana por este bullicioso lugar es como pasear por una feria callejera. Deténganse a tomar un helado con los niños, son famosos en ese rincón de la ciudad.
Visiten la Casa de Frida La «Casa Azul» fue la casa de la pintora durante toda su vida, allí nació y murió. Es uno de los museos más visitados de México, por eso, si piensan ir lo mejor es comprar los boletos por internet. La espera es larguísima, no habríamos podido hacer tanta fila con los niños.
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Consejos viajeros
*Hay mucho para ver en Ciudad de México y aunque cuatro días parezca suficiente, hay que tener en cuenta que las distancias son largas y por momentos el transito es lento. Nos quedaron muchas cosas por conocer!.
*Hace mucho que queríamos viajar a México y disfrutar de sus paradisíacas playas, pero también pretendíamos conocer un México más auténtico. Por eso dividimos el viaje en dos partes. Primero estuvimos en Ciudad de México y Taxco, una de las ciudades coloniales mejor conservadas del país y luego viajamos a la Riviera Maya.
*Con respecto a la seguridad, es sabido que Ciudad de México tiene problemas grandes de delincuencia y las cifras son estremecedoras, pero eso no quiere decir que el país viva un clima de violencia constante. Obviamente que hay que tener cuidado de por dónde transitar y en qué horarios, pero no más que en otros sitios del mundo. Con los niños hay que tener en cuenta que hay zonas en las que la aglomeración de gente es impresionante y no hay que despistarse ni un segundo, pero como en todo, usando el sentido común y teniendo algunos cuidados básicos, es posible hacerlo.
*Clima: Ciudad de México se encuentra a 2250 mts sobre el nivel del mar. El clima en el mes de julio es muy agradable, durante el día las temperaturas oscilan entre los 20 y 25 grados. Si bien es una época lluviosa, durante el día llovió sólo una tarde, cuando fuimos a Coyoacán, pero fue una llovizna suave que con un impermeable no nos impidió ningún paseo.
*La locomoción: nos aconsejaron no tomar el metro en las horas pico ni tomar taxis callejeros. Lo más seguro es moverse en Uber o en taxis particulares recomendados por las oficinas de turismo.
*Compras: Las artesanías de México son tan bonitas que dan ganas de llevarse todo. Hay muchos lugares en los que venden artesanías típicas. Uno de los que visitamos y nos gustó, sobre todo porque tenía variedad de cosas y estaba tranquilo de gente, fue el Mercado Ciudadela. Es un mercado lleno de artesanías representativas de diversas regiones de México.
