Llegó diciembre y aunque todavía quedan semanas intensas antes de terminar el año, las vacaciones de verano están muy cerca. Quizás algunos de ustedes tienen ganas de hacer un viaje con sus niños, pero todavía no se han decidido. Viajar con niños tiene momentos estresantes y en los que hay que ejercitar la paciencia, pero para mí es una de las cosas más disfrutables de la vida. Anímense a probar!. No importa a dónde, si es cerca, lejos, en auto, barco, ómnibus o avión, lo esencial es que cada experiencia viajera se convierta en una oportunidad de unión y aprendizaje para toda la familia.

En el post de hoy, cinco motivos por las que elijo viajar con niños.

1. UNE A LA FAMILIA Y ESTRECHA LOS VÍNCULOS. Si tengo que elegir una razón para viajar con niños, me quedo con esta. Hoy en día, nuestra vida diaria es muy agitada, vivimos corriendo, trabajamos muchas horas, llevamos y traemos niños de un lugar a otro y tenemos poco tiempo libre. Por eso, los viajes son un momento especial para nosotros, un tiempo sin obligaciones, compromisos sociales, computadoras ni llamadas telefónicas. Una instancia de unión familiar, de desconexión total, en el que además de conocer el mundo, encontramos tiempo para conversar tranquilos, para disfrutar de la naturaleza, para reírnos, jugar, descubrir habilidades, aprender y valorar el estar juntos.

2. TODO QUEDA Y ES UNA MANERA DE APRENDER. Muchas veces habrán escuchado decir que no vale la pena invertir en viajar con los niños porque se van a olvidar de todo. Es cierto, quizás no recuerden el nombre de una ciudad que visitaron, un monumento o un palacio bonito, pero sin que se den cuenta les estamos mostrando el mundo, abriendo nuevos horizontes y lo que sí van a recordar es el tiempo en familia, un tesoro que les va a quedar para toda la vida.

3. ES DIFÍCIL TENERLOS LEJOS. Hemos viajado sin los niños, solos con mi marido, y lo recomiendo. Siempre viene bien una escapada en pareja, pero tenemos claro que los viajes de a dos los vamos a realizar en gran medida cuando crezcan. Con hijos chicos es difícil disfrutar plenamente, estando a miles de kilómetros. Por eso, en esta etapa de la vida, la mayoría  de las veces elegimos viajar con ellos.

4. SE VUELVEN MÁS FLEXIBLES Y TOLERANTES. Los viajes muchas veces nos ponen a prueba, hay momentos en que surgen imprevistos y las diferentes experiencias los convertirán en niños más tolerantes, pacientes y flexibles. Cada viaje es una lección de vida, hay que saber esperar, descubrir destinos, hacer filas, buscar un lugar para almorzar, caminar para llegar al hotel y muchas otras cosas más. Una vez que están en el baile tendrán que bailar, de eso se trata!.

5. VAN A CRECER Y NO VAN A QUERER VIAJAR CON NOSOTROS. Aunque en este momento nos cueste imaginarlo, esto va a suceder. Los niños crecen demasiado rápido y llegará un día en que viajar con los padres dejará de ser el mejor plan del mundo. Por eso, es el momento de disfrutarlos!.