Se acercan las vacaciones de julio y muchos quieren viajar, sin embargo elegir a dónde ir no es algo tan sencillo, antes de embarcarnos en una «nueva aventura viajera» hay varios elementos para considerar. ¿Qué destino elegir para viajar con niños?, es una de las primeras preguntas que todos nos hacemos cuando tenemos ganas de organizar un viaje en familia. Es difícil aconsejar un lugar, la elección de un viaje depende mucho de los intereses de cada uno y de las edades de los pequeños. No todos queremos lo mismo, sin embargo, a la hora de elegir destino hay algunas cosas que pueden ser útiles para todos y ayudarán a organizar unas divertidas vacaciones familiares.
Aquí una guía que los ayudará a elegir el próximo viaje…
PARTICIPARLOS EN LA DECISIÓN
Es bueno participar a los niños en la elección del destino, esto no quiere decir que sean ellos los que tomen la decisión final, pero sí escuchar sus intereses y conversar juntos sobre las diferentes opciones que tenemos pensadas. A nosotros nos gusta mostrarles guías, fotos, imágenes o vídeos de otros viajeros que sirven para estimular su interés y luego evaluar qué cosas priorizar.
COMBINAR CIUDADES CON NATURALEZA
Siempre intentamos combinar unos días de ciudad, con otros de playa, campo o montaña. Nuestra experiencia es que los niños, de todas las edades, pasan mucho mejor en lugares al aire libre y en contacto con la naturaleza que en las ciudades grandes. Pero no dejen de visitar una ciudad por ellos, combinen dos o tres días de ciudad y luego naturaleza.
CIUDADES PEQUEÑAS vs. GRANDES URBES
Hemos visitados grandes ciudades con los niños y reconozco que por momentos se puede volver algo estresante, pero piensen que no hay mejor regalo que mostrarles el mundo tal cual es. Lo ideal es visitarlas un tiempo corto, dos, tres o hasta cuatro días. Nuestra experiencia es que siempre hemos disfrutado más en ciudades chicas que en grandes metrópolis.
ACTIVIDADES PARA TODOS
Dentro de los destinos elegidos tratamos de buscar actividades que nos gusten a todos. En todas partes hay planes que pueden entusiasmar a los niños. Por ejemplo, combinar la visita a un museo en la mañana, con el zoológico por la tarde. Hay cosas simples que a los niños les encantan y no son sólo para ellos: hacer un picnic en un parque, ver el atardecer en algún punto alto de la ciudad o recorrer un barrio en bici, son actividades que nos gustan a todos.
PLAYAS Y ANIMALES
Hay algunas cosas que no fallan, cada uno sabe qué es lo que más le gusta a sus hijos. En casa la playa nos gusta a todos y si vamos a viajar al verano no puede faltar. Otra cosa con la que los niños se fascinan son los animales y siempre tratamos de visitar los zoológicos, reservas o parques naturales de los destinos elegidos.
BUSCAR INFORMACIÓN DEL LUGAR
Una cosa que nos resulta útil para definir un destino es consultar a otros viajeros, ver vídeos, leer blogs, o foros con información del lugar. Siempre hay alguien que ya visitó ese destino con niños y sus recomendaciones pueden servir.
EL PRESUPUESTO
Hay destinos más caros que otros y cuando viajamos en familia todo se multiplica, por eso este punto no es menor. Hay que estudiar los precios, porque muchas veces el avión nos resulta caro, pero el costo de vivir en el lugar es tan económico que vale la pena invertir en los aéreos. Hay algunos trucos que sirven para economizar, por ejemplo hospedarse en un apartamento en lugar de un hotel, comprar los pasajes con tiempo, cocinar en vez de salir a comer afuera o buscar actividades gratuitas que ofrezca el destino. Con ganas y un poco de imaginación se pueden mediar los deseos de viajar con el presupuesto.
DISFRUTAR DE ESTAR JUNTOS
Los niños no necesitan lujos, grandes hoteles, ni destinos exóticos para pasarla bien. Viajar en familia, a donde sea, ya es un gran plan para ellos. Tener tiempo libre para estar juntos, compartir charlas, caminatas y momentos sencillos, son suficientes para disfrutar de unas buenas vacaciones.